Los científicos han conseguido el hallazgo tras analizar 32 años de temperaturas de la superficie global grabadas por satélites
Los científicos hicieron el descubrimiento cuando analizaron
32 años de temperaturas de la superficie global grabadas por satélites.
Descubrieron que una alta cordillera, en la planicie antártica, contiene bolsas
de aire atrapado que alcanzaron casi los 93 grados bajo cero el 10 de agosto de
2010 en la Antártida, según explicaron el lunes investigadores en la Unión
Geofísica Americana en San Francisco.
El récord de la temperatura mínima registrada hasta ahora
era de 89,2 grados bajo cero. Se tomó en 1983 en la estación de investigación
rusa de Vostok, en el este de la Antártida, afirmó Ted Scambos, científico del
Centro Nacional de Información sobre Nieve y Hielo en Boulder, Colorado.
"Teníamos la sospecha de que esta cordillera antártica
iba a ser extremadamente fría, y más fría que Vostok porque la colina está a
más altura", dijo Scambos en un comunicado. Las temperaturas son unos 10
grados más frías que cualquiera alcanzada en Alaska o Siberia.
La investigación llevó a cabo estudios de dunas de nieve.
Los científicos vieron grietas en la nieve y se preguntaron si la capa superior
de nieve se estaba agrietando. Eso los llevó a buscar los datos de
temperaturas. Las temperaturas extremadamente frías se deben al aire que queda
atrapado y que se mantiene.